La fervenza del río Belelle es una de las cascadas más impresionantes que tenemos en Galicia. El río nace en el parque natural de las Fragas del Eume pero sigue una dirección noroeste, hacia la ría de Ferrol.
Desde el Roxal, del municipio de Neda, sale una pista asfaltada en muy mal estado que nos lleva hasta una minicentral eléctrica. Si le tenemos cariño a nuestro coche es mejor dejarlo al inicio. Además disfrutaremos de un paseo río arriba con un bosque de ribera impresionante.
Una vez llegada a la central que abastece a la ciudad de Ferrol, cruzaremos el río y un sendero nos conducirá en pocos minutos a la cascada.
El salto de agua se asemeja al del río Toxa con sus 45 metros de altura.
Resulta muy difícil llegar a la base de la cascada, ya que la fuerza del salto crea una gran nube de agua, que nos empapará en un visto y no visto.
Para ver su inmensidad, podremos optar por bajar casi hasta el cauce y después desviarnos hacia la derecha, trepando entre las rocas.
El camino de vuelta es el mismo, hasta la central. Allí sale un camino hacia el mirador de Viladonelle. Se trata de una subida fuerte, en zigzags, hasta un mirador en el que tendremos de frente la fervenza.
CARATERÍSTICAS:
1.- Localización: desde Roxal (Neda) sale una pista asfaltada que nos llevará hasta la central eléctrica. Desde allí sale una senda que nos deja en la fevenza.
COORDENADAS: 43º28'55.931"N 8º7'15.942"W
2.- Dificultad ninguna. Acceso sencillo.
3.- Apta para ir con niños.
4.- Señalizada.
5.- Ruta en WIKILOC
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